En el quinto piso del Ministerio de Economía, cerca del despacho de Luis Caputo, no se preocupan por el salto de los dólares “libres”. Allí sentencian: “No habrá sorpresas”. Y luego aclaran que la salida del cepo cambiario será “un proceso”. Traducción: el mercado va a estar al tanto y no será a través de una devaluación brusca, algo que los actores ven como un fantasma a la vuelta de cada esquina.